Aprovechar la energía renovable y limpia de los paneles solares tiene una puesta en marcha sencilla, cómoda y económica.

A día de hoy, existen 3 tipos principales de paneles solares:

·          Paneles solares fotovoltaicos

·          Paneles solares térmicos

·          Paneles solares híbridos (fotovoltaico más térmico)

Independientemente de las ventajas de cada uno y de sus usos y aplicaciones, la instalación es similar y siempre conlleva una serie de riesgos al trabajar sobre tejados, cubiertas y fachadas.

Instalación de paneles solares

La instalación de los paneles solares, ya sean fotovoltaicos o térmicos comienza por el anclaje de los soportes metálicos que serán montados sobre el tejado o cubierta, y trabajar a grandes alturas, conlleva tomar una serie de prevenciones que eviten accidentes.

La estructura a emplear varía de acuerdo a la inclinación de la cubierta, una vez colocados los soportes metálicos se coloca sobre ellos los paneles solares. En España la mayoría de los tejados y cubiertas están inclinados entre 20º y 35º, lo cual favorece el rendimiento de las instalaciones de paneles solares.

Riesgos al trabajar sobre tejados y fachadas

Instalar paneles solares conlleva estos riesgos principalmente:

·          Caídas al mismo nivel.

·          Caídas a distinto nivel (desde lo alto).

·          Proyección de fragmentos y partículas.

·          Golpes y cortes.

·          Atrapamientos.

·          Caída de objetos.

·          Contactos eléctricos.

·          Estrés térmico.

·          Radiaciones no ionizantes.

·          Sobreesfuerzos, posturas forzadas y movimientos repetitivos.

Lamentablemente se producen accidentes en las instalaciones de paneles solares por caídas de manera más frecuente de la deseada. Estas caídas se producen por diferentes motivos y no siempre se es consciente de la facilidad de evitar cualquier riesgo que puede convertir en una auténtica desgracia un proyecto de instalación y montaje de paneles solares.

Encima de un tejado o cubierta se encuentran los siguientes peligros:

·          Falta de orden u obstáculos: Se corre el riesgo de tropezar con el propio equipo de trabajo, especialmente si hay una climatología adversa, si hay mucho sol o si llueve, por ejemplo. Hay que organizar bien el espacio de trabajo aún incluso cuando se está trabajando encima de una escalera fija para fachada.

·          La manipulación de cargas que impiden la visibilidad: transportar y colocar los módulos solares es un gran riesgo ya que es otro elemento más que puede provocar tropiezos y accidentes, por lo que la escalera fija en la fachada debe ser altamente segura y resistente, y el trabajador debe estar bien formado en prevención de riesgos laborales, genéricos y específicos de su puesto de trabajo.

·          Hundimientos: antes de proyectar el trabajo de instalación, se deben realizar una serie de inspecciones y auditorias del espacio de trabajo para asegurarse de que está en las condiciones adecuadas para trabajar en él.

Las personas que emplean escaleras de mano, andamios o plataformas para los trabajos en altura corren el riesgo de sufrir heridas, hematomas, inflamaciones musculares, fractura de huesos, esguinces, desgarros musculares e incluso, la muerte. Tanto por una caída del propio trabajador, como causando estas lesiones a otra persona al caerse herramientas u objetos en manipulación.

Para evitar los riesgos específicos de trabajar en altura se deben instalar sistemas anticaídas:

·          Escaleras con protección de espalda mediante aros o sujeción mediante líneas de vida

·          Puntos de anclaje

·          Raíles deslizantes

Gracias a estos sistemas todo el equipo de profesionales que se va a encargar de la instalación, está protegido frente a caídas.

Para que el tránsito de los trabajadores sea seguro es necesario instalar medios auxiliares de forma que el acceso y paso de los operarios no conlleve prácticas de riesgo, para ello son necesarios medios colectivos e individuales de protección, como son las escaleras fijas para fachadas, redes anticaída, barandillas y equipos de protección personal.

Como la mayoría de paneles solares se instalan en zonas altas, el uso de las soluciones de elevación es una cuestión muy importante. En Esmelux apostamos por las escaleras fijas para fachadas y nos centraremos ahora en desarrollar las cuestiones más relevantes en cuanto a la seguridad en la instalación de paneles solares en escaleras.

Escaleras seguras para la instalación de paneles solares y otros trabajos en altura.

Para un trabajo como es el de la instalación de paneles solares no se debe jamás trabajar con escaleras portátiles, también conocidas como escaleras de mano.

Las escaleras para instalar paneles solares deben ser fijas y ancladas a la fachada.

Es el momento de mayor riesgo para el trabajador es precisamente este, el que conlleva subir y bajar de estas escaleras para realizar el montaje de los paneles solares.

Por su importancia, se debe definir de forma segura el acceso a la cubierta y este acceso debe ser permanente ya que los paneles solares requieren de mantenimiento y limpieza, de esta manera además el gasto del acceso permanente queda amortizado, es más seguro y rápido a la hora de emplearlo y supone un ahorro económico respecto a una plataforma elevadora.

Es decir, la forma con la que mejor se va a trabajar tanto en su instalación como en su mantenimiento, es contando con una escalera fija para fachadas, porque es una inversión que permanece, lo que no sucede con el resto de soluciones de elevación.

Una escalera fija para fachadas debe cumplir las siguientes normativas para ser instalada de forma permanente:

·          Escalera de mantenimiento en edificios: norma DIN 18799-1

·           Escalera de emergencia: norma DIN14094-1

·          Escalera de acceso a máquinas: norma DIN EN ISO 14122-4

Los componentes de la escalera deben estar certificados según las normativas internacionales DIN EN ISO 14 122 y EN 353-1.

Estas escaleras además deben estar fabricadas según las últimas indicaciones en la norma DIN EN 1090 y cumplir con la nueva normativa europea: DIN 18 799-1, DIN 14 094-1 y DIN 14 094-2.

Todas estas normas las cumplen las siguientes escaleras fijas para fachadas, también conocidas como escaleras de gato o escaleras de crinolina, que pasamos a comentar a continuación:

Escalera fija con protección de espalda de un tramo: es una escalera de jaula que ofrece una total seguridad al trabajador, ya que está protegido por un marco circular compuesto por anillos metálicos y tirantes de protección de espalda.

Esta escalera está fabricada en aluminio natural. La barandilla de salida y las piezas de sujeción a la pared son de acero galvanizado por inmersión en caliente.

Cuenta con una amplia gama de accesorios como plataformas intermedias, puertas de seguridad, salidas con base y piezas de anclaje al suelo.

La ponemos a disposición de nuestros clientes fabricándola para cualquier altura, si bien hay que tener en cuenta que se coloca en tramos máximos de 9.000 mm por lo que si se necesita acceder a mayor altura se debe adquirir la escalera fija con protección de espalda de dos tramos.

Esto es así porque se cumple con el RD 486/97 en el que se establece que las escaleras fijas que tengan una altura superior a 9 metros deben llevar plataformas de descanso.

Escalera fija con protección de espalda en acero inoxidable: su acabado es en acero inoxidable V4A, incluyendo barandilla de salida y piezas de sujeción a pared. Su diferencia con las anteriores es dicho material de fabricación.

Escaleras fijas galvanizadas con aros de protección: su acabado es en acero galvanizado por inmersión en caliente, incluyendo barandilla de salida y piezas de sujeción a pared.

En todos los casos las escaleras fijas con protección de espalda cuentan con un ancho de 520 mm, tiene peldaños estriados y antideslizantes de 30x30 mm, un paso entre peldaños de 280 mm, una altura libre inferior entre 2.200 - 2.500 mm, largueros de 60 x 25 mm y aros de protección de espalda de 700 mm de diámetro.

Son escaleras verticales fijas con protección de espalda compuestas por diferentes aros que van rodeando la escalera para garantizar en todo momento la seguridad en el ascenso y descenso.

La protección de espalda o protección dorsal es la estructura de protección perimetral compuesta por los aros comentados anteriormente, que rodean la escalera.

De hecho, el propio RD 486/97 establece que las escaleras fijas que superen los 4 metros de altura deben disponer, al menos a partir de esa altura, de una protección circundante. Lo mismo indica el Código Técnico de la Edificación, en su apartado 1. Las buenas prácticas de la NTP 408 establecen que a partir de 6 metros de altura es obligatorio el uso de la protección de espalda, debiendo estar situada a partir de una altura de 2.5 metros desde la plataforma. Y la UNE-EN ISO 14122-4:2005 recomienda que a partir de 3 metros dispongan de esta protección dorsal comenzando a partir de 2.20 metros.

Son ampliamente empleadas para trabajos de mantenimiento en edificios y en la evacuación de personas por el exterior de los edificios.

En última instancia se debe consultar con un experto para asegurarse en cada caso de que material debe estar fabricada la escalera, no obstante, ya sea de aluminio, de acero inoxidable o de acero galvanizado, son altamente robustas y seguras.

Ventajas de las escaleras fijas con protección de espalda

· Permiten al operario descansar durante el ascenso y el descenso apoyando la espalda en los propios aros.

·    Tienen un efecto psicológico positivo en cuanto que el operario se siente más protegido.

·    Protege especialmente en caídas hacia atrás.

·   Sencillez en su montaje.

·   Variedad de accesorios.